EL SALTAMONTES MARINERO

Erase que se era un Saltamontes llamado Flick (en realidad, aún és) que desde ahora y por mucho tiempo formará parte de estas curiosas crónicas que nos ocupan, aunque la historia no empece por el principio seguro que os gustará. Allá voy:
Aquella mañana el Saltamontes Flick de pie en el muelle miraba concentrado al Horizonte, era aquel su gran día.... por fin de examinaba.
Quien pudiera mirarlo detenidamente vería un saltamontes vestido así: gorra "cinturón blanco" de capitán de fragata, gafas modelo "Tom Cruise en Top Gun" sobre nariz blanco cremoso, chaqueta de capitán de las sardinas (no se sios acordais: gallina, gallina capitán de las sardinas), pantalón super estiloso modelo "Ameba Mari Chalada", zapatos nauticos último grito y por último, con más estilo que la Beckham, colgando del brazo izquierdo, un cubo para vomitar.
Con toda la tripulación de la cascara de nuez esperandolo con cara de pocos amigos y tras una eternidad pensandoselo subió a bordo besando, literalmente, las tablas de cubierta... y al soltar amarras, mientras empezaba aquella travesía despatarrado aún en cubierta intentando enderezar el cubo (y no diremos para que) se acordó que se había atado los cordones de los zapatos juntos para no olvidar comprar la biodramina.....
El trayecto del examen náutico consistía en llevar la cascara de nuez de San Pachá a San Pacharán, un trayecto lleno de miradas borda al mar y vaciados de cubos mañanares...
Nestro Saltamontes favorito aprovó y entonces se acodó que otra cosa ue no había comprado era una cascara de nuez propia para practicar.....
Si algún día os dejais caer por Cutrecans, mirad hacia arriba, en un balcón seguro que vereis un timón de prácticas y a un saltamontes al lado usando su amado cubo......